- Nombre: Jennifer Cortez
- Edad: 36 años
- Ubicación: Zeeland, Michigan (Estados Unidos)
- Ocupación: Cuidadora
- Tiempo corriendo: 3 años
- Peso inicial: 89 kilos
- Peso final: 70 kilos
Durante el Día de Acción de Gracias de 2018, tenía un dolor de estómago extremo. Después de ver al médico y hacerme algunas pruebas, me enteré de que tenía la enfermedad de celiaquía, un trastorno autoinmune que daña el intestino delgado. Antes de mi diagnóstico, mis hábitos alimenticios eran muy poco saludables. Comía alimentos procesados que no eran buenos para mí, pero se ajustaban a mi apretada agenda. Siempre probaba la última dieta de moda, pero perdía dos kilos y lo dejaba. Las dietas eran demasiado duras o demasiado irreales para seguirlas día a día.
En 2015, cuando tenía 30 años, perdí a mi mejor amiga por un cáncer. Fue difícil de sobrellevar, y me comí mis emociones, ganando 6 kilos. De nuevo, intenté probar una nueva dieta y una rutina de ejercicios, esta vez a través del CrossFit, pero dejé de hacerlo tras perder 5 kilos. Pero la gota que colmó el vaso fue que me diagnosticaron que era celíaca, porque me vi obligada a cambiar mis hábitos alimenticios radicalmente. Si comía gluten, mi estómago se hinchaba dos o tres tallas de pantalón, seguido de dolores extremos y fatiga. Era una pena, así que hice algunos cambios en la dieta y añadí ejercicio.
→ Entrena con Runner's World gracias a la aplicación BestCycling LIFE!
Antes, nunca pensaba en lo que comía. Me alimentaba con pizza, tacos, helados, patatas fritas, refrescos y todo tipo de comida basura. Ahora, cuento y Comprar en Amazon macros que tomo; no siempre soy estricta, pero sigo tomando buenas decisiones. Tomo mucha avena, fruta, verduras, pollo, yogur griego, camarones y batatas. Un mes después de empezar a hacer estos cambios en mi dieta, decidí añadir algo de ejercicio. Sabía de nbsp;€ en Amazon puede tener en tu cuerpo, así que me subí a la Crédito: Under Armour.
Esas primeras carreras no fueron fáciles: no podía correr unos pocos de kilómetros sin tener que pararme. Recuerdo que el primer kilómetro me llevó 12 minutos. Fue abrumador porque quería ser buena en ello de inmediato, y me frustraba no serlo. Pero empecé a Por Jennifer Cortez y a hacer ejercicios en casa para ayudar a desarrollar músculo. A medida que avanzaba, empecé a correr con amigos y a disputar algunas carreras virtuales.
Siguiendo la progresión natural de un corredor, seguí aumentando las distancias hasta el punto de completar algunos medios maratones. Menos de tres años después de empezar, estoy entrenando para mi primer maratón este otoño y mis tiempos y mis ritmos han bajado notablemente. Desde que empecé a correr, he perdido más de 12 kilos. El running me ha dado una confianza increíble en mí misma. Empecé despacio y me fui haciendo más fuerte, mental y físicamente, a medida que me iba marcando y alcanzando objetivos. Esos objetivos eran muy importantes para mí porque no se limitaban a perder peso. Incluían la distancia, la velocidad y salir el mayor número de días posible, aunque sólo fuera a caminar.
Los primeros años se centraron en conseguir un mejor aspecto físico. Ahora quiero ayudar a los demás. Organizo entrenamientos en pista en el parque que hay detrás de mi casa. Hago retos de fitness con un grupo de mujeres en Facebook. También estoy tomando clases para convertirme en entrenadora de nutrición y más tarde en entrenadora personal. Al ver que alcanzar mis objetivos ha mejorado mucho mi vida, sé lo abrumador que puede ser hacer esto y sentirse solo. Quiero asegurarme de que no tengan que hacerlo.
Si te estás embarcando en tu propio viaje para perder peso, no te centres únicamente en el objetivo final. Eso puede ser abrumador y desalentador. Es más probable que abandones si lo haces. Disfruta de su situación actual. Aprende a amar tu cuerpo: es el único que tienes. Y aprende a ser tu propia competencia. Cada persona está construida de forma diferente. La comparación puede robarte la alegría y detenerte en tu camino. No te preocupes por los demás; preocúpate por ti. Céntrate en lo que has conseguido y siéntete orgulloso.
