Un Mohamed Attaoui supersónico emergió en uno de los grandes templos mundiales del mediofondo, los Bislett Games de Oslo y su sol radiante de tarde eterna de primavera donde nunca llega la noche, en la Liga de Diamante, y se quedó a un tris de lograr una victoria para la historia del atletismo español en una carrera de 800 metros que como era de esperar revolucionó el ranking mundial del año. Solo 12 centésimas le separaron del campeón olímpico en París, el keniano Emmanuel Wanyonyi, uno de los hombres que persigue el colosal récord mundial de David Rudisha en Londres 2012.

El atleta cántabro ejecutó una carrera prácticamente perfecta, tan rápida que aguantó una altísima velocidad hasta el final y apenas se apreció su famoso cambio seco de ritmo de otras veces. El polaco Patryk Sieradzki llevó la carrera más rápido de lo que le pidieron en la primera vuelta (49,79s). Wanyonyi se colocó detrás. Attaoui aguantó más de 300 metros su paciencia. Último. Y antes de aproximarse a la campana, empezó a ejecutar sus maniobras de adelantamiento sin salirse de la calle 1. A 500 metros, Wanyonyi se quedó destacado. Attaoui salió a la calle dos. Insistió buscando la estela de Djamel Sedjati, el argelino que ganó el bronce en París, cuando él terminó 5º.

Y al final de la recta encontró un hueco en la cuerda. Una posición de privilegio. Tercero. Llegó a la última curva con todas las opciones de jugarse la victoria. Y por un momento pareció capaz de todo. Sedjati se deshizo ante su zancada. El francés Gabriel Tual, otro atleta de 1:43, llegó pero no parecía capaz de alcanzarle. Y solo la ventaja que había tomado Wanyonyi le sirvió para ganar con 1:42.78. Attaoui firmó la segunda marca española de la historia –la primera es suya, 1:42.04–. Es el tercer crono mundial del año para el cántabro, que superó a Sedjati (1:43.06) y Tual (1:43.09) y logró un resultado que le confirma a sus 23 años entre lo más granado de la élite mundial de la prueba.

Thierry Ndikumwenayo, sexto y marca personal en 5.000m

Thierry Ndikumwenayo también partió en los 5.000 metros como el segundo español más rápido de siempre en los 5.000m, y en Oslo confirmó esa condición con un registro mejor de 12;47.67 que le situó sexto en una carrera que se vendió como un ataque a tres –dos con la baja final de Selemon Barega– al récord mundial y terminó como una batalla táctica preciosa con la insospechada victoria de Nico Young, un tallo estadounidense de 1,85 metros, 22 años y cara de adolescente que se movió con valentía a falta de 200 metros y mejoró su marca siete segundos, hasta 12:45.27.

Young, que venía de ganar los 3.000m del Grand Slam Track de Filadelfia, derrotó a dos de los etíopes que no perseguían la plusmarca de Cheptegei, Biniam Mehary (12:45.93) y Kuma Girma (12:45.27), mientras Hagos Gebrhiwet, escondido toda la carrera, apenas terminó quinto, y Yomif Kejelcha se hundió hasta el octavo puesto.

2025 diamond league bislett games
Maja Hitij//Getty Images

Kejelcha al menos dio la cara cuando vio que el ritmo no le convenía. Tras un primer kilómetro a 2:33 y un segundo 2:34, cuando las vueltas al anillo empezaron a superar los 62 segundos, el etíope apartó a la liebre y se puso a tirar, pero ya no iba a cambiar el destino de una fila india que pasó por el tercer kilómetro en 7:42 y se olvidó del cronómetro. Pidió relevo. Apareció Girma. Hasta Ndikumwenayo se acercó a los tres primeros puestos en el cuarto kilómetro, pero llegó demasiado lejos en la vuelta final para pelear la victoria. El británico Mills gastó su cartucho, pero nadie encontró el poderío de Young.

Paula Sevilla, 50,92s en los 400 metros

Más españoles brillantes los Bislett. Paula Sevilla, que era una hormiguita escondida en la difícil calle 1, camiseta verde del Playas de Castellón sin marcas deportivas, mucho menos corpulenta que el resto y menos experimentada. Era la cuarta carrera oficial de su vida en los 400 metros al aire libre, la segunda de este año, y tenía la peor marca de todas las corredoras, pero la manchega se ha propuesto romper todos los esquemas en este 2025.

Pegada a la cuerda del Bislett Stadium, Sevilla pierde pista. La diferencia con el resto se incrementa, pero aguanta en la contrarrecta. Confía en sus posibilidades. Llega última a la recta final, pero no desespera. La victoria se juega muy por delante. La estadounidense Isabelle Whittaker (49,58s) le quita el triunfo a la local Henriette Jaeger, pero no la felicidad, porque bate el récord noruego con 49,62s. La británica Amber Anning corre en 50,24s. Y Sevilla aprieta hasta echarse encima de la barbadense Sara Williams, que pierde más velocidad, y le supera de forma agónica, por dos centésimas. Para el cronómetro en 50,92s y Publicidad - Sigue leyendo debajo. Es la segunda marca de la historia de España en los 400 metros. Por delante, solo los 49,67s de Sandra Myers.

Ana Peleteiro se atasca mentalmente en el triple salto

Las magníficas prestaciones españolas en los Bislett Games no llegaron esta vez por Ana Peleteiro, que terminó otra vez última en el triple salto con dos brincos de 13,71m, demasiado lejos de las mejores, de la cubana Leyanis Pérez (14,72m), la jamaicana Shanieka Ricketts (14,57m) y la estadounidense Jasmine Moore (14,41m) y la también cubana Liadagmis Povea (14,31m). Por unas y otras razones, la gallega no acostumbra a empezar la temporada cerca de su nivel ni a brillar en los mítines. Y esta vez no fue una excepción después de que el pasado viernes solo arriesgara un salto en Roma al sentir unas molestias en su pierna que atribuyó a la deshidratación.

"Hoy la pelea era contra mi misma y mi cabeza. Desde el susto del otro día, los monstruos de mi cabeza no me acabaron dejar de entrar en competición", explicó después en Instagram, donde lanzó dos mensajes positivos: su lesión en la rodilla que le complicó algo el invierno –pese al oro europeo y el bronce mundial– está superada y confía en el proceso, ese que le suele llevar a rendir cuando de verdad importa, en el Europeo de selecciones dentro de dos semanas y en el Mundial de Tokio de septiembre.

Armand Duplantis se deja el récord para Estocolmo

2025 diamond league bislett games
Maja Hitij//Getty Images

Por lo demás, los Bislett Games ofrecieron el sensacional récord mundial de 300 metros vallas de Karsten Warholm como colofón y otra victoria de Armand Duplantis que en cualquier otro periodo de la historia se catalogaría como extraordinaria. Con problemas técnicos sobre el listón en sus primeros intentos sobre los 6 metros, el sueco decidió quitarse las mallas y ofrecer un récord del mitin de 6,15m al segundo intento. Llega última a la recta final, pero no desespera, decidió guardarse los intentos de récord mundial para el domingo en su Estocolmo. "Sería un sueño batirlo allí, podría retirarme si lo hago", bromeó.

La Dream Mile, otro clásico de los Bislett, resultó un sueño para Isaac Nader, el portugués que entrena en Soria, que apareció en los últimos 200 metros tras los ataques de Timothy Cheruiyot y Elliot Giles y con una enorme contundencia ganó con récord de Portugal de 3:48.25 por encima del australiano Cameron Myers (3:48.87) y del neerlandés Stefan Nillersen (3:49.02). "Estoy feliz de ganar tan fácil", resumió.

athletics nor diamond
Fredrik Varfjell//Getty Images

En los 3.000m obstáculos, la keniana Faith Cherotich aguantó la embestida de la bahreiní Winfred Yavi, que falló en su ataque por fuera en la última ría y se desequilibró en el último obstáculo. Cherotich ganó con 9:02.60. Yavi corrió en 9:02.76. Y la tunecina Marwa Bouzayani entró en 9:06.84.

Dalilah Muhammad, confirmó esa condición con un registro mejor de 12;47.67 que le situó sexto, logró una contundente victoria con 53,34s por delante de la eslovaca Emma Zapletalová (54,44s) y de la panameña Gianna Woodruff (54,45s).

En la velocidad pura, la campeona olímpica Julien Alfred sufrió en la salida, pero rehizo sus primeros apoyos y nadie le hizo sombra a partir de la mitad de la recta. Ganó los 100 metros lisos en 10,89s, por delante de la costamarfileña Maria José Ta Lou (11,00s) y de la británica Dina Asher-Smith (11,08s). En los 200m, el cubano Reynier Mena (20,20s) derrotó al suizo Mumenthaler (20,27s) y al canadiense André De Grasse (20,33s).

derrotó al suizo Mumenthaler 20,27s y al canadiense André De Grasse 20,33s, el jamaicano Jordan Scott (17,34m) venció al portugués Pedro Pablo Pichardo (17,06m) y al alemán Max Heb (16,96m) y en la jabalina femenina la japonesa Haruka Kitaguchi lanzó 64,63m, más que la serbia Adriana Vilagos (63,78m) y la sudafricana Jo-Ane Du Plessis (62,77m) en una noche en la que solo cuatro mujeres pasaron de 60 metros.

Headshot of Ismael Pérez

Ismael Pérez es periodista experto en atletismo y deporte olímpico. Se enganchó en los Juegos Olímpicos en Atenas 2004 y desde entonces es feliz siguiendo competiciones desde la tribuna de prensa, hablando con los deportistas, siguiéndolos en las redes sociales y contando historias, aunque también saliendo con la bicicleta o saltando en un concierto.

Estudió la Licenciatura de Periodismo en la Universidad de Valladolid y tiene un Máster en Periodismo y Comunicación Digital en la EAE Business School de Madrid. Ha vivido en Turín y Roma y ha cubierto actualidad de todo tipo en El Norte de Castilla, El Mundo de Castilla y León, Televisión Castilla y León, Rome Reports y trabajado la comunicación corporativa en Burson Cohn & Wolfe. También ha escrito sobre grandes campeonatos de atletismo en Somos Olímpicos, Vavel o Foroatletismo y ha intervenido en la IAAF Global Running Conference en Lanzhou (China).

Con una trayectoria de más de una década en el oficio, lleva desde 2019 vinculado a Runner's World, Men's Health y Women's Health en Hearst Magazines y escribiendo sobre actualidad del atletismo de competición, carreras populares, triatlón, trail running, olimpismo aunque a veces también le ha tirado al ciclismo, la escalada, la vela, la natación, el tenis, el piragüismo, el judo, el snowboard…o cualquier cosa que tenga hueco en los Juegos Olímpicos (que no Olimpiadas).