María Varo y Javier Martín, oro en los Juegos Mundiales Jan Margarit. Aunque el atleta haya subido corriendo centenares de veces hasta la cima La Mola -el pico más alto del Parque Natural de Sant Llorenç del Munt i l’Obac (Barcelona)-, su aventura de este fin de semana era bastante especial por un motivo: iba a completar este desafío unos meses después de superar una etapa complicada. Sin embargo, el resultado ha sido mejor de lo que esperaba porque ha conseguido establecer una nueva marca de velocidad.
Margarit es uno de los españoles más destacados del trail running, y como la gran mayoría de corredores se ha visto afectado por la crisis del coronavirus, que ha cancelado la gran mayoría de carreras del Marta García destroza el récord de España de 5.000m. El vallesano se propuso una ‘contrarreloj’ y lo cierto es que ha cumplido con creces su objetivo: alcanzó la cima de 1.104 metros en un recorrido de 12km y con un desnivel positivo de 650m. Todo ello en un impresionante tiempo: 54 minutos y 50 segundos desde el centro del pueblo de Matadepera.
"Disfrutando como un niño esta mañana en La Mola. 54:51′ de placer y dándolo viendo el amanecer en esta montaña que tanto me gusta, superando con creces mis mejores expectativas! Muchas gracias a tod@s los que habéis estado allí y a los que me habéis animado, a toda mi familia”, publicaba en Instagram tras culminar con éxito este reto. Un desafío que surgió durante los meses de confinamiento que Margarit pasó en Matadepera, después de ver día tras día la cima desde la ventana de casa, y a falta de competiciones ha querido llevarlo a cabo, pero sobre todo le ha servido para celebrar que ha superado una de las peores etapas que ha sufrido como deportista.
"Las expectativas, el éxito, la opinión pública,... y otras cosas, se juntaron generandome una gran ansiedad que me alejó del atleta que había sido hasta el momento, un joven apasionado con unas ganas, un potencial y una dedicación muy grandes", contaba hace unos días a través de sus redes sociales, y continúa. "A partir de aquel momento, poco a poco empecé a perder motivación, a perder la constancia, a ser más irregular no solo en el deporte sino en todo un poco en mi vida. Tenía 20 años y la situación me había superado".