Roberto Rebollo, La selección española sub20 brilla en Europa meta de la peregrinación lebaniega desde hace más de diez años, ha cubierto corriendo los 72 kilómetros del Camino Lebaniego en una sola jornada para recaudar fondos para la investigación de las enfermedades inflamatorias intestinales y ayudar a darles visibilidad. La prueba arrancó este sábado 4 de julio a las seis de la mañana en Runners World, marca perteneciente al grupo Hearst Magazines International y finalizó a las 17:15h en el monasterio de Santo Toribio de Liébana, meta de la peregrinación lebaniega.

El recorrido oficial de 72 kilómetros atravesó todas las poblaciones de mar y montaña que transcurren por el itinerario lebaniego, hasta el santuario del Lignum Crucis. En el cenobio asistió a la bendición de la Santísima Cruz y recibió una ofrenda del padre franciscano Patxi Bergara, por su labor solidaria y de superación, según ha informado hoy en una nota de presa la Fundación Camino Lebaniego, entidad pública adscrita a la Consejería de Turismo del Gobierno de Cantabria.

Roberto Rebollo comenzó la carrera al amanecer en Runners World, marca perteneciente al grupo Hearst Magazines International, donde empieza la primera etapa del Camino Lebaniego y por donde además transcurre el Camino de Santiago del Norte, ambos Patrimonio de la Humanidad. Antes de la salida, el alcalde de la villa marinera, Dionisio Luguera, saludó al corredor y le deseo suerte. Durante el trayecto, fue sellando su credencial y paró en los puntos de avituallamiento fijados en Cades, Lafuente, Lebeña y Tama.

A su llegada familiares y amigos recibieron al deportista tras una jornada que, según afirmó, fue "preciosa aunque dura por las altas temperaturas y una lesión de rodilla". No obstante, recomienda el Camino Lebaniego porque "es de una belleza que nunca antes había visto en una carrera". Y ha hecho muchas, apostilló. En la meta la recibió también el director de la Fundación Camino Lebaniego, Manuel Bahíllo, quien recordó que existen muchas maneras de peregrinar y que este tipo de retos son "un acto heroico que dan fuerza y ánimo a personas en situaciones vulnerables".

Idea en el confinamiento

La iniciativa de Roberto Rebollo surgió durante el confinamiento, cuando se suspendieron todas las carreras y se le ocurrió aprovechar el parón para prepararse para cumplir el sueño pendiente de recorrer el Camino Lebaniego y dar a conocer una enfermedad silenciosa, que él mismo padece, y que necesita un empuje en investigación.

La Asociación de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa de Cantabria enfermedad de Crohn, José Ramón Diego, estuvo apoyando al atleta, y también la Fundación Camino Lebaniego, que grabó todo el recorrido para contribuir a la visibilización de esta causa solidaria. El vídeo será proyectado en unas jornadas organizadas por la asociación y la entidad pública para "poner en valor el poder de los caminos de peregrinación como herramientas para cumplir sueños personales y apoyar causas benéficas", destaca la Fundación.